Sin más,
sin puntos suspensivos,
sin quizás
y sin un mañana.
Y lo siento, no voy a permitir(me) fingir sonrisas.
Porque me dejaré fluir y sonreír a carcajada limpia.
Y si un día me veo triste,
dejaré bajar el río por mis mejillas y luego saldré airada,
sin porqués,
ni cuestiones sin respuesta,
ni dilemas en mi cabeza.
Ya es hora de vivir porque quiero ser feliz.
Comentarios
4 respuestas a «Es la hora»
Muy bonito! Está bueno permitirse un rato para estar triste, así recuperamos fuerzas y seguimos adelante más fuertes. Saludos!
Toda la razón, ¡Un abrazo! 💙
todos aspiramos a ser felices…pero primero hay que cruzar la noche….besos al vacío desde el vacío
Sí… 💙