Categoría: Escritos

  • Fin.

    Aquí termina mi etapa quinceañera.

    Lo siento, no puedo seguir con eso, y no te lo tomes a pecho. Esto que escribo aquí mismo puede ser dedicado a ti, o no. No te lo pienso decir, no abriré la herida, ya cicatrizó. No dejaré huella otra vez. Porque borraré y barreré. Buscaré, encontraré y esconderé. Tal vez vuelva a romper o me vuelvan a romper, y quizás vuelva a querer. Pero a mí, ni me mires. Lo imaginado nunca es la realidad. Lo que parece va más allá de lo que ves. Y lo que crees que valía la pena, ni eso. Y justo por eso, entiendo y vuelvo a entender, que no vales la pena. Que no eres nadie, que eres de todos y del mundo; que antes eras del mío. Tal vez destacaste y destacarás, en algún momento, en todos ¿cómo no verlo? Eso no es lo que quiero, ya no te quiero. Y no escribo con odio, mucho menos con rencor. Escribo tranquilamente y sin prisa, aunque el tiempo se acabe con las palabras volando encima del papel al ritmo de los latidos de mi corazón que renació después de morir por ti. Y te quiero, pero lejos de mí.
    Fin.

  • ángel endemoniado

    Soy un ángel endemoniado, a mi no me has ganado, aún no me has enamorado. Sé que si tú quieres yo quiero y sé que si yo quiero tú quieres. Pero esto es un juego, donde tú ganas y yo pierdo porque te quiero. Me dejo llevar por el tiempo, por el momento. Soy feliz y lo disfruto al cien por cien. Soy diferente si quieres que lo sea, aún así lo sigo siendo. Voy de dura, antes de que me rompas el corazón te lo romperé yo a ti. Que lo tengas claro. Y puede que lo haga sin querer, pero es así. No volveré a perder. Todo es sencillo depende de cómo lo quieras mirar, pero a mí ni me mires. Y prométeme que te olvidarás de mí. Has tenido cojones de seducirme, ten los mismos para destruirme. Matarme. A besos. En la cama. Y después evadirte. No estoy encadenada a ti, aunque de alguna forma sí y no lo quiera pensar, ni hasta reconocer. Lo siento, perdóname. Desaparece de mi vista. No soy quien te piensas que soy, no soy como me ves. Puedo llevarte al cielo y también al infierno. Pero sí que soy la que te romperá el corazón con mil y un besos, mirándote a los ojos. Y tal vez te insultaré, y no querré pero lo haré, puede que nunca te diga lo que mi alma me pide a gritos, pero con una mirada te diré todo aquello que mis labios, ahora besándote en imágenes y a la distancia, son incapaces de decir.

  • inhumana

    Lo sé, lo veo, lo siento. Me ves derrotada, inhumana, deshinchada, sin vida, desganada. Agarrando el alma en las noches; que no se desgarra del todo. Aguantando las lágrimas en los días más soleados; que no quiero que se sequen, maldita sea, ya no llueve en mis ojos. No hay llantos, ni más gritos. Todo son silencios en medio del vacío. Y que si sonrío es porque vivo pensando en ti. Y ya te lo dije, y te lo vuelvo a decir: vivo por ti, que si no ya no estaría aquí. Y un día pasará, llegará mi querida y desgraciada verdad; que no me quieres, que nunca me has querido, que no te importo y que no me necesitas. Y ya llegó. Sigo fingiendo que no me importa, que no me afecta. Que aún soy feliz, que mi llama no se ha apagado. Que mis ganas se han quedado, que no desgarran la soledad, aunque la desangran con sus propias armas, con sus queridas garras. Pero todo eso son pensamientos y palabras encerradas dentro de un alma rota y desecha por el tiempo, llena de decepciones, y de miedos. Encerradas en mi mente perversa, maldita, errónea, desordenada y negativa, como la vida misma.

  • A veces

    A veces me pregunto que para qué todo esto, si es absurdo. Yo aquí, mírame, escribiendo entre mis días más tristes. Y vuelo pero sé que caeré, todo esto es un sueño. Que pena decirlo, que triste vivirlo como si fuera la realidad. Porque mientras tú me sonríes yo me muero por besar tus labios, porque mientras tú me miras yo me deshago lentamente. Y no sabes lo duro que es. Que sí, que me dejo llevar por el tiempo, el viento, el sol, la brisa, el agua, las mil y una maravillas, tus queridas sonrisas, tus apreciadas palabras; que sí, que me dejo llevar por ti. Y te quiero aquí, with me. Y no me hagas esto, ya no quiero sufrir más, no quiero escribir sobre ti o dedicarte algo bonito; un pequeño texto. Quiero mirarte, observarte, dedicarte una de mis sonrisas más sinceras y, después, pegar mis labios a los tuyos y susurrarte al oído un Te Necesito. Que es difícil, que todo me sale mal, y hasta al revés. Pero créeme, esto se me hace muy complicado. No quiero imaginar un futuro a tu lado, quiero vivir a tu lado, pasar más tiempo contigo que escribir cualquier cuento tonto en esta maldita hoja que no se cumplirá jamás, y que tú ni leerás.

  • El culpable tú eres

    Lo siento pero la culpa es tuya. A ver, yo no tengo la culpa. No tengo la culpa de ponerme nerviosa cuando te veo, no tengo la culpa de que se acelere mi corazón. No tengo la culpa de sonreír como una tonta cuando tú también sonríes. No tengo la culpa de estar enamorada de ti, o de estar enamorándome, o no sé. Pero, no, esto no puede estar pasando. No tengo la culpa de hacer el ridículo delante de ti, pero ¿por qué? Esto no es justo, no, no. Pff.. no me gusta. Quiero decir, tú me gustas, y mucho. Pero es que no, tengo miedo, miedo de todo esto. Tengo miedo del amor. De volver a ilusionarme para nada. De caer en todas tus tentaciones sin querer. Y es que ya estoy cayendo, cayendo de amor por ti. ¿Pero esto qué es? No, por favor. Esto no puede estar pasando. Que sea un sueño, pero, hecho realidad.

  • Déjame vivir…

    ¿Y qué pasa? ¿No puedo llorar o qué? ¿Qué malo tiene eso? Tengo sentimientos, por eso lloro. Llevo demasiado tiempo siendo fuerte, guardándome todo dentro de mí y ya no puedo más. Necesito sacarlo y plasmarlo en un papel, que no sirve de nada pero me da igual ¡me da igual! Necesito llorar y eso hago, sacarlo hacia fuera todo. Que si no lloro ya no soy ni yo. Necesito revivir, renacer, volver a empezar. Quiero morir. ¡Y estoy muriendo por ti! Que gritaré. Y grito: ¡te quiero! ¡te amo! ¡muero por ti! ¡déjame vivir! Entre tus brazos, claro, hasta morir.

  • Sueño

    Por favor bésame, esto es serio, no es ningún juego. Puede que después de sentir el contacto de tus labios con los míos despierte de esta maldita realidad y me encuentre al principio de un bonito sueño, el que siempre soñé. Te necesito aquí y ahora. Abrázame, quiéreme. Dame tu amor y yo te daré el mío. Enganchémonos para el resto de nuestras vidas. Quedémonos juntos para siempre, y no a lo lejos. Uno al lado del otro. Bésame el cuello, la cara, bésame los labios. Bésame entera. Quiere todo de mí, hasta cada defecto. Yo amo todo de ti, eres demasiado perfecto. Hazme el amor con y sin palabras, al ritmo de una canción romántica. Enséñame a vivir y no me des razones para ser feliz si eres tú la causa de mis sonrisas.

  • ¡Hey!

    Hola mis querido seguidores, la sorpresa está al caer. Os la desvelaré cuando llegue a los 200 seguidores, siento que os merecéis saberla de aquí a poquito.

    Sé que me precipité un poco diciendo que sería a los 1000 seguidores, pero soy así de caótica.

    ¡Ya os constaré cómo funcionará! ¡Estoy muy ansiosa y tengo unas ganas que no os lo podéis creer!

    ¡Gracias por leerme! ¡Un besazo y un abrazo!!

  • móvil encendido

    Y dejaré el móvil encendido por si en medio de la noche se te ocurre decirme algo. Por si de repente te acuerdas de mí, o por una vez en ésta vida sabes de mi existencia. Por si me necesitas. Por si te apetece decirme algo bonito o desahogarte conmigo. Echármelo todo en cara y reírte de mí. Decirme toda la verdad hasta hacerme reventar. Pero yo seguiré ahí, despierta, esperando tu mensaje y pensaré que quizás al enviarlo te has acordado de mí por un momento, aunque sea corto, y eso me sacará una sonrisa inesperada que me alegrará el día y un poco la vida.

  • soy distinta

    Yo soy diferente, mírame, no soy como las demás. Y créeme no lo digo porque quiera serlo; sin querer ya lo soy. Ando a paso lento con la música en alto y un libro entre mis manos. Desaparezco por un tiempo. Me enamoro, no de él, de una versión que creé por mí, por todo lo que una vez leí. Y soy feliz al verte y saber que no eres así, que eres peor o mejor ¿mejor? Bah, yo me merezco alguien por igual pero opuesto a mí. Algo como sal y azúcar, pizza o fruta, alcohol con agua y no fanta, chicle con sabor a marihuana. De ahí nace lo diferente pero lo justamente necesario, ni más ni menos.

  • tu problema, el mío

    El problema es que la odias porque la quieres y ella a ti no. Eres el tío más cabrón porque te rompió el corazón, pero te enamoraste de ella como a ninguna. Vas de duro y vacilas a todo el mundo, pero tu interior está roto y estás sufriendo, y no quieres, y no puedes evitarlo. No puedes olvidarla. Y yo lo sé, que en tus ojos al mirarla se ve; que la quieres, que la amas. Y dices odiarla pero tu corazón siente otra cosa muy distinta.Y por roto el tuyo, el de ella también. No puedes ser menos, tienes que ser el más. Y te quedas debajo de todos, siendo inferior porque no eres nadie. Vas de guay y ahora eres un mierdas. Ella se enamoró una vez de ti. Lo jodido es que ella sigue enamorada de ti pero no de quién eres ahora, sino del que eras antes, y lo peor es que tiene la esperanza de que vuelva, cuando todos excepto ella, saben que nunca jamás volverás. Y ella sigue, ahí, de pie, torciéndose e intentando no volverse a romper otra vez. Y ella está ahí, no la ves en persona pero es recordada por ti en cada maldito segundo. Ella es ese nombre que hay dentro de tu cerebro y no puedes borrar, esa sonrisa que no paras de recordar, esos ojos que no puedes olvidar. Y por imbécil, te jodes. Pero que sepas que ella soy yo, que si le cambias el género a este texto ahora la jodida soy yo.

  • Cansada.

    Estoy cansada, cansada de toda esta farsa. Cansada del mundo, cansada de la gente, cansada de la vida. Cansada de ti, de mí. Cansada de todos. Mi vida es un chiste sin gracia.

  • Querido,

    Que si no eres tú soy yo. Que vamos a peor en vez de a mejor, yo necesito amor, del tuyo o de otro. Que si te plantas delante de mí y me besas no te rechazaré, que si dices que me quieres, yo te querré más. Que si elijo a alguien siempre será a ti. Y sí, quiero morir por tus besos, abrazada entre tus brazos. Quiero sentir tus labios, amar tus caricias. Tenerte, y ser tuya. Pero el tiempo pasa, y yo espero. Y nunca me canso, pero también quiero. Y tal vez sea dura, o una falsa con los demás, hasta conmigo misma. No puedo seguir así, tú me lo adviertes con una mirada, tus ojos dicen más que nada; infinitas palabras que yo entiendo, entre silencio y silencio. Y que si tú no te atreves, quizá tendré que aceptar otro que me ofrezca dolor, y aunque finja no importarme, aunque sea sólo un desafío, yo me ofrezco involuntariamente a luchar contra él, y no quiero joder. Porque siempre tú serás mi herida, mi vacío más bonito, lo que siempre he querido y nunca he tenido. Te he perdido, y te necesito. Y si te lees esto, espero que lo tengas en cuenta, querido.

  • te enamoran

    Te enamoran para darte una patada en el corazón, llenarlo de golpes, cogértelo y aplastarlo con la palma de su mano hasta dejarlo roto y deshecho para después soplar y dejar que todas las cenizas de éste se vayan para siempre. Y así es, él lo a conseguido ¿me equivoco? Pero lo amas con toda tu alma, y aunque te mate matarías por él. Aunque te falle, le darías siempre otra oportunidad. Porque el amor nos hace diferentes, nos intenta hacer mejores de lo que somos pero en realidad nos hace peores. Porque el amor es una puta enfermedad psicológica que no tiene cura y nunca lo tendrá. Y tú sólo quieres ser feliz, sea como sea. No quieres más dolor ni sufrimiento, pero es que no hay manera de encontrar la felicidad, ni buscándola ni no buscándola, no hay ya ni una salida. ¿Que la que tiene que cambiar eres tú para adaptarte a esta mierda de sociedad? ¿Pues sabes qué? Que no te da la gana, que tú eres como eres y que no vas a dejar que te jodan más, que los que van a joderse son ellos porque ya estas cansada de esta farsa. Que por el día todo el mundo finge ser feliz. Que te vienen de majos y después te la clavan por la espalda. Que todos son unos interesados, que a las buenas todos son tus amigos, pero a las malas ¿quién te queda?

  • vida(s)

    Tú no lo entiendes. No intentes entenderlo. Nunca lo entenderás. Si ni me entiendo yo, ¿cómo vas a entenderme tú? Déjame. Déjame sola con mi querida soledad. Estoy bien, estaré bien. Subiré hasta allí, un sitio lejano, tan lejano que está justo a tu lado. Desde aquí no se ve. Y no me detendré hasta llegar y cuando esté arriba, en la cima, miraré abajo, más allá de mis pies, de mis límites, de mis condenas perpetuas y de mis cadenas que ligan mi corazón y mi cerebro contradiciéndose al mismo tiempo; las calles oscuras, las personas vacías, las casas sin ninguna alma. Yo en el cielo, ellos en el suelo. Yo perdida, ellos con una vida digna y por lo mínimo con un sueño medio cumplido. Aun estoy a tiempo de morir, en el más allá se esconde mi libertad, mi última oportunidad. No me vengas a buscar, no te preocupes por mí. No te atrevas a detenerme, no hay ni un cuarto de solución. Ya no hay nada que pueda cambiar. Si ahora no existo y cuando deje de existir es como si no dejara de existir, entonces sólo quedará por vivir mi vida que no vale ni un segundo de todas esas bonitas vidas que están juntas; por fuera pareciendo indestructibles y por dentro siendo más que destructibles.

  • la salida

    Seduce mi mente y te daré mi cuerpo, encuentra mi alma y seré tuya para siempre. Aquí y ahora te escribo la verdad más pura, porque hace tiempo que seduciste mi mente y ya no tiene cura. Porque hace tiempo que encontraste mi alma, justo en aquel momento cuando se perdió en ti. Y seguro que yo no te pertenezco pero, tú para mí eres todo lo que necesito y eres demasiado para lo que yo me merezco. Debería ser ilegal amarte como te quiero  quererte como te amo, mirarte como te miro, sonreír al pensar en ti, morirme por dentro al verte. Debería ser ilegal, y que bien que no lo sea. Y si lo fuese, traspasaría la barrera, rompería todas las reglas y mucho más. Nunca dejaría de quererte como te quería y como te quiero, y puede que se pueda y se quiera. Y no puedo y tampoco quiero. Y no vale sólo eso, hay que decirlo, pero no puedo o tal vez no sé decir te quiero a la cara, sino con una mirada y una sonrisa y con miles de palabras encarceladas en una maldita hoja, rota y perdida por el tiempo que lleva escondida, buscando una huida; la salida.

  • aun así

    Y que absurdo todo esto, nunca llegaremos a más que eso. Si seguimos como el primer día, esto no alcanzará ni una pequeña salida. Tal vez haya un problema y hay que hallar la solución. Tal vez encontremos respuestas, indecisas, pero supongo que también echamos en falta las preguntas ¿no? Y de repente todo cambia. Tú eres yo, yo soy tú. Nosotros no lo somos, y nos convertimos en ellos. Nos dejamos llevar por lo que no deberíamos. No escuchamos nuestros corazones, ya no sentimos ni medio latido. Del todo rotos, nos alejamos. Y aun así queremos quedarnos.

  • desmadre regular

    Y eso de querer a alguien que no te quiere, bueno, ya es algo habitual. Rutinario. ¿Qué piensa la vida sobre esto? ¿Por qué nunca encontramos nuestra media naranja? ¿Por qué siempre acabamos sufriendo? No sé, tal vez, cuando antes encontremos a quién nos quiere, a nuestra alma gemela, antes seríamos felices. Puede que antes la vida nos ponga a prueba, nos haga ser más fuertes o, como mínimo, intentar serlo. Porque, lo siento, pero yo ser más fuerte no puedo. Quizás menos sí, pero más no. Porque eso de quererte se me hace cada vez más pesado. Porque eso de olvidarte se me hace cada vez más duro. Porque eso de que no me quieras me mata. Porque la vida no es justa, ni conmigo ni con nadie. O todos somos felices o todos estamos tristes. Y es que sonreímos ocultando lágrimas, y es que el orgullo nos impide avanzar. Y eso de luchar ya no es visto en ningún lugar. Guerreros que se esconden en medio de la oscuridad. Y en las calles repletas de silencio, donde se esconde todo ruido creado por humanos y no humanidad, ¿dónde se ha visto hoy en día la buena sociedad? sólo es un pequeño desmadre regular, ahí hay justo la libertad.

  • Era una mañana fría y triste.

    Era una mañana silenciosa, al contrario de mi corazón que, como siempre, gritaba al vacío un  «Te quiero». Pero esta vez, esta vez ya no era como debía ser. Era diferente, distinto. Y en medio de la calle me encontraba yo. Era un sitio desagradable y a la vez agradable. Mi pequeño y único sitio íntimo, donde allí, sin pensarlo y sin querer pero con necesidad, se humedecieron mis ojos hasta que de ellos empezaron a salir lágrimas que bajaban por mis mejillas, ya rojas, sin detenerse nunca más. Me estaba muriendo, muriendo de dolor. Mi cuerpo vacío. Mi corazón cerrado. Ya no había solución, no. Y me morí. Estoy muerta. Cuesta creerlo, pero sí. Morí dentro de mi propio charco de lágrimas, donde en todas ellas se escondían miles de recuerdos, todos preciosos. Todos pareciendo demasiado irreales. Todos siendo reales.

  • Pienso en ti.

    No dejo de pensar en ti. A veces pienso que me quieres, y aunque no lo sepa, me lo creo. Me gusta creérmelo. Ser nosotros. Ser felices. Me gusta, me encanta, imaginarme miles de historias junto a ti. Y aunque sé que nunca ocurrirán, aunque sé que quedarán encerradas en mi corazón, sigo imaginando. Sigo pensando en ti. Porque te quiero, me gusta quererte. Porque me quieres, me gusta creer que me quieres. Son mis historias, mis fantasías, mis sueños. Y ahí nadie se interpone, sólo tú dentro de mis pensamientos. Y te quiero, no porque lo piense, sino porque lo siento. Y soy feliz queriéndote. Y así, sin más, te quiero.

  • buena suerte

    Haces las cosas sin pensar y si las piensas mucho no las haces. Te dejas la piel para unas cosas y para las otras pasas de todo. No te importa nada y a la vez te importa todo. La sociedad te define como quiere y aparentas lo que no eres. Creen conocerte pero el que no te conoces eres tú. Niegas las verdades y vives de mentiras. Esperas algo inesperado que nunca lo será. Sonríes pero tu corazón llora. Gritas y nadie te escucha. Te clavan una espada en la espalda y te preguntan porqué sangras. Sabes más de lo que parece y te haces el ignorante ante todo. Vas a contracorriente  y te hundes en lo corriente. Quieren entenderte y lo que consiguen es joderte, porque tú no los entiendes a ellos y ellos a ti tampoco. El mundo se cansa de ti y tú del mundo. Crees que vives y vives con los días contados. Te lamentas de los errores y los errores se lamentan de ti. Quieres aquello imposible pero no haces ni lo posible. No sabes vivir y vives de lo que sabes. Porque es ahora o nunca. Porque vives los sueños de los demás o vives los tuyos. Porque eres fuerte, o buena suerte.

  • ¿Alguna vez?

    ¿Alguna vez alguien se ha parado a preguntarte si estás bien, qué es de tu vida. Donde estuviste, donde te gustaría estar, viajar. Qué te gustaría hacer, qué te gustaría ser. Cómo has sentido la brisa tocar tu rostro, cómo te gustaría que fuera tu vida más allá de las montañas? ¿Alguna vez alguien se ha parado a escucharte, a observarte?

  • Suicidemonos

    Nosotros somos de suicidarnos en las palabras, de estrellarnos cayendo con las letras hacia adelante. De no acabar las frases o terminarlas demasiado tarde.

  • aire


    Siento el aire fresco corriendo por mi piel, mi rostro,  mi cabello. El sol no está, se ha marchado, machacado. Y disipo en el fondo la Torre de l’Aigua. Y un temblor recorre mis huesos, tengo miedo. ¿Qué será? Intento no darle vueltas y sigo observando el paisaje. Veo edificios, de distintos colores… marrones, blancos, negros. Y cielo azul, nubes danzando un baile. Nada más, aire. Cambio de planes, ahora estoy en mi habitación. Miro por la ventana y distingo el astro solar como ilumina las hojas verdes, las de más encima. Y continuo mirando, las hojas como se mueven al compás del reloj de mi corazón. Introspección.

  • Verano

    Tengo frío en este verano desalmado. La luna me llama, me está llamando, por teléfono. Y me habla, con los sentidos. Me dice que me llene el alma de alegrías, que mi corazón sienta mil y un deseos, ilusiones y mansiones de amores.

  • Ahora

    Me prometí no volver a llorar y lo conseguí. Ahora no me salen las lágrimas.

  • Quiero deciros,

    a todos aquellos que me siguen, que gracias por seguirme. Sois geniales, aunque no os conozco, pero sé y siento que tenéis un corazón de buena fe, honesto, sensible, amable y querido, por vosotros y por los demás. Aunque a veces cuesta quererse, pero entre todos intentaremos hallar la manera de amarnos, porque es importante para la existencia humana. Si no existe el amor, perdidos nos encontraremos ¿o no? ¿Me equivoco?

    Simplemente, gracias. Cuando lleguemos a los mil seguidores, que es uno de mis sueños, pequeñitos, entonces haré una gran sorpresa. Pero, de momento, seguiré colgando textos salidos como gotas de mi alma, quebrantada y a la vez amada.

  • Desamor

    Sufrí porque yo quise, porque yo me lo gané a pulso, inmediatamente sin querer y queriendo. Escribí sobre desamor, hasta no poder más. Hasta deshauciarme de mi misma, rompiéndome, echando el corazón a la mierda, literalmente, quedándome sin él.

  • trouble

    Es todo una farsa, una mentira ¿estoy soñando o qué?

  • Alma

    Un cuerpo es un cuerpo, pero un alma es más que alma y eso. Llena de dolores, cicatrices y ensoñaciones. 

  • quiero

    No quiero que me cuentes todo lo que ya sé sobre la vida, la típica teoría. Quiero que me enseñes a vivir, a reír, a disfrutar, a dejarme llevar. Quiero fluir, volar. Quiero sentir, amar. Llorar de felicidad. Quiero empezar otra vez des del minuto cero, cuatro, siete o diez, me da igual. Quiero ser yo, tú. Quiero empezar y no acabar.

  • libre

    《..Y sí, digo libre, pero dentro del vacío en el cual me encuentro. Y no quiero entrar en detalles, que no lo son en absoluto, porque sería explicar aquello inexplicable. Que yo lo entiendo, pero los demás no. Es mejor dejarlo así. Porque cuando algo no se entiende, a simple vista se ve bonito pero a medida que te introduces en el caos ves la verdadera mierda del cual está formado, y como supongo que para la mayoría es mejor no romperse la cabeza, se quedan mirando por fuera y ni se inmutan a observar lo que hay dentro que es justamente lo real.》