Estoy reparándome ¿vale?

Recuperándome.

Sé que no soy luz,

ni brillo en la oscuridad.

Sólo un corazón deshilachado,

que se va rescontruyendo,

pieza por pieza,

paulatinamente.

Mirada al frente,

guerra interminable.

Siento que estoy rota,

pero llegas tú y me recompones

hasta que me vuelvo a romper por idiota.

Porque soy tonta, todo esto que te cuento

es absurdo.

Por mucho que me leas,

nunca vas a saber lo mucho que te quiero,

lo que realmente siento.

Lloro estrellas amargas, mis lágrimas.

Me siento frustrada; hoy no,

no es el día para hablar pero,

sí para abrazar.

¿No puedes venir y quedarte conmigo?

Aquí, en el suelo, mirando el techo.