Etiqueta: decepción

  • Martes

    Marte(s),
    con ese de soñar
    o saltar.
    Y caer y sufrir.
    Porque después de una ilusión viene la decepción.

  • Sensación rara

    Hoy he sentido;
    Que no me prestas atención,
    que no me respetas.
    Y así me pierdo,
    me hundo,
    me muero.
    Soy una muñeca de cristal que se rompe en un millón de pedazos con sólo un toque ligero.
    Y, lo siento, pero hay ciertas cosas que no voy a tolerar.
    Necesito tiempo,
    necesito espacio
    -mental-.
    Me necesito,
    más a mí que a ti.

  • Adjetivos

    Que si estás muy delgada,
    que si tienes unos quilogramos de más,
    que si me siento así,
    que si tengo la sonrisa tuerta,
    que si mis piernas son demasiado gruesas,
    que si mi culo no está respingón,
    que si no tengo caderas,
    que si tengo demasiadas,
    que si no soy musculoso,
    que si soy bola…
    Todos estos adjetivos, debería servir para aprender la hermosura e imperfecciónde cada uno.

  • Imperfectos

    Tengo poco pecho, mucha cadera y rollitos de primavera en mi barriga. Mi trasero no está firme y tengo algún que otro grano en el rostro.
    Que vale, que no soy perfecta. ¿Quién dice que hay que serlo? La sociedad; tan hipócrita, tan poca cosa y, lo peor, formada por nostros.
    Que manía tenemos, tienen, tenéis en tener que ser sí o sí la perfección. ¿Pero que no os dais cuenta de que no existe?
    De cara viene la crítica negativa, que apesta, que duele: «Te has engordado», «No tienes la barriga plana», «Mírate, si se te cae el culo»…y un sinfín. ¡Pero qué absurdez! Eso de no querernos todos e ir a una. ¿Por qué nos machacamos tanto los unos a los otros? ¿Por que no en vez de repartir dolor repartimos amor?
    Lo hermoso es que somos distintos y, a la vez, tan iguales.
    Nos llamamos humanos y, qué pena, no lo somos.
    Yo estoy cansada, ¿Vosotros no?
    Cambiemos el mundo, la sociedad. Cambiemos nuestra forma de vernos, de observar a los demás. Admiremos la belleza, disfrutemosla.

  • Actos (de fe)

    Gracias por decirme que me quieres, pero demuéstralo.
    Es muy fácil decirlo y es sencillo hacerlo.
    Hay veces, días, en los que me siento triste y tú sólo me tocas seduciéndome hacia ti.
    Y no me arropas con tu corazón;
    me duele.
    Mi cuerpo tirita de frío y ya casi es verano.
    Es raro.
    Seré yo,
    serás tú.
    O seremos nosotros que ya no somos,
    y si sí, a momentos que se amontonan solos poco a poco.

  • El dolor tocando a la puerta

    «Mi abuela decepcionada conmigo,
    a mi madre le doy pena.
    Mi hermana que se burla de mí
    y mi padre, el único orgulloso.»

    Mira, yo no decidí que sufrieramos.
    Nos tocó, el dolor nos eligió
    siguiéndonos para matarnos.
    Que la vida es mala suerte,
    mala fama.
    Fúmatelo todo, total,
    te vas a morir o te van a matar.
    Tú decides si vivir o sufrir.
    Si reír o llorar.
    Agarra al mundo con la mano, sostenlo.
    ¿Qué más da ya?