Creo en ella

Sonreí,
dudé,
grité
y callé.
Luego sentí,
me derrumbé.
Porque fui y sigo siendo,
no hay mejora en mi misma.
Hay derrota y poca vida.
Mucha ira,
empatía cero.
Creo en la oveja negra;
la que sonríe cuando hay que callar,
la que duda cuando hay que ser firme,
la que grita en vez de hablar.
La que siente más que vive,
y en gerundio se esconde sin más,
yendo hacia atrás.


Descubre más de perezitablog

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Comentarios

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más de perezitablog