5.

Hoy hay un cuadro distinto; el cielo está más iluminado. El calor no se aprecia y aunque vaya con una camiseta de tirantes, sigo sintiendo Marzo, cayendo en mis hombros. El peso de sus días se me ha quedado calado en los huesos; me tiritan hambrientos.

Agradezco al mundo esta pequeña pausa, porque él como yo, necesitábamos respirar. Parar. Reflorecer y sanar.


Descubre más de perezitablog

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Comentarios

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más de perezitablog