bésame, pero el alma

Dibújame el alma, tal vez, así, se reconstruya. Quizá, se rompa más. Con tu sangre, con tus propias manos. Deja ir, lanzar, pequeños pero intenso besos. Sin miedo, déjate llevar. El viento, el mar, el olor a sal. Tu cuerpo vuela, el mío ha naufragado, se ha apagado. Lo siento, no sé qué siento. Ya no puedo más. Eso de levantarme, de intentar salvarme, de quererme y amarme, son mentiras. Demasiado malas para no ser descubiertas. No pretendo que entiendas nada, tampoco me interesa. Todo ya da igual, hasta mi vida también.

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