Se habla mucho de la vida y se siente poco. La mayoría habla del amor como algo horroroso pero, ¿Quién lo ha sentido profundamente? Casi nadie. No es sólo quererse los días impares, los momentos bonitos o en las épocas florecidas. Es amarse a cada respiro y sentir a cada latido, aunque estés amargado o llegues a odiar con toda tu alma. Porque del odio, también se ama.
Se habla
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Comentarios
Una respuesta a «Se habla»
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¡Genial reflexión final! Creo que tienes razón y es en los peores momentos donde se demuestra el compromiso del amor. Saludos 🙂
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