Eres

-Eres el único que me entiende. -Pensé, pero no se lo dije.

Fruncí el ceño y me lo quedé mirando, pensativa. Era todo lo que necesitaba para ser feliz. Y, aunque mi felicidad no podía depender de alguien, era de aquella forma, la norma del amor: cuando uno se enamora, su felicidad depende del otro ser.


Discover more from PEREZITABLOG

Subscribe to get the latest posts to your email.



Leave a Reply

REDES SOCIALES

¡ÚNETE A MI CAOS!